viernes, 21 de diciembre de 2012

SI TODO ACABA/EMPIEZA HOY

SI TODO ACABA HOY...
Sabremos que tanta batalla no sirvió para nada,
que no nos condujo a ningún lugar mejor de nosotros mismos.
Sabremos que tanta carencia de unos para tanto exceso de otros
 jamás pudo calmar el verdadero hambre de nuestra esencia.
Sabremos que aunque las lágrimas y el dolor nos acercan a la alegría y el amor,
en realidad no eran necesarias.
SI TODO ACABA HOY...
Sabremos el tiempo que perdimos recorriendo caminos, trabajos, relaciones...
que no conducían a nuestros sueños.
Sabremos que no habría falsas ilusiones
que mereciesen el precio de dejar de ser verdaderos.
Sabremos que toda conquista está vacía si nunca llegamos a conquistar
nuestro corazón, el corazón de la vida y el de todas nuestras relaciones.
SI TODO EMPIEZA HOY...
Reiré mucho más, amaré con más ganas, lloraré sin tanta pena,
celebraré cada instante, rezaré cada mirada, cantaré cada corazón,
respiraré cada palabra, dormiré cada ilusión y despertaré cada sueño,
confiaré más, agradeceré el poder sentir y el estar viva.
SI TODO SIGUE HOY...
Sé que todo sigue igual en apariencia pero
que ya nada es lo mismo porque tampoco yo lo soy.
Sé que merezco estar bien
para creer y crear un munndo mejor.
Sé que estoy VIVA y sé lo que amo,
lo que sueño, lo que rezo.
Sé que mis pasos tienen la fuerza para dejar huella
y la medicina para que el crecimiento y la transformación
 sigan abriéndose camino.
SI TODO SIGUE HOY...
Sé que lo que conozco es sólo el principio de una realidad mágica e infinita
y que quiero despertar para ser parte y totalidad de su alquimia.
Sé que la belleza inunda todo a mi alrededor
y que elijo la responsabilidad de reconocerla.
Sé que sigo siendo caminante del no tiempo
porque de alguna manera,
TODO ACABA, TODO SIGUE Y TODO EMPIEZA HOY
 
 

domingo, 11 de noviembre de 2012

Meditación

¡Escucha...! Diluye el ruido de tu mente, disipa la niebla.
¡Escucha...! La vida ocurre en todas partes y no nos percatamos.
Crees que no está ocurriendo nada ahora... ¡Escucha!
No a mi, ni a ti, ni a los directores del juego... escucha la esencia de la vida recorrer tu cuerpo en cada impulso de sangre, en cada aliento, en cada rezo. Escucha la vida abriéndose paso bajo tierra, cayendo río abajo por laderas, la hoja replegándose, la raíz expandiéndose, el control perdiendo espacio, el instinto abriéndose camino.
Tal vez en un futuro cercano dejemos la ilusión de la dominación del mundo, de los otros, de la vida, tal vez dejemos atrás el papel de saqueadores de la esencia, saqueadores de la magia, saqueadores de lo salvaje del alma que nos habita.
En ese instante que ya existe, que será mañana y es ahora, al fin somos silencio en el ruido y ruido en el silencio.
 
 

miércoles, 31 de octubre de 2012

Cre-acción

Hoy me levanté de ánimo creativo y pinturero, consciente de mi capacidad para diseñar paisajes y profundos horizontes que conecten sueños. Practico muchos artes. A veces cocino amistad y oportunidades de reencontrarse al horno acompañado de un vino con esencia e invito a amigos a practicar eso de traspasar el tiempo. Otras veces paseo, escribo, abrazo, leo, imagino, juego, estudio, hago pompas de jabón, riego las plantas, veo pelis, me emociono, miró a un bebé, no hago nada, duermo la siesta, limpio, ensucio, me apoyo en un muro al sol y cierro los ojos, respiro... en fin, como os digo son muchos los artes que practico y lo hago consciente de que en ese instante estoy creando la percepción de mi vida y la de aquellos a los que soy capaz de tocar.
Hoy por ejemplo, coloreé un sol brillante y calentito en esta mañana de otoño y se lo regalo a Elena, que anda pachucha y la da fuerza el calorcito y a Bea que aunque nunca está pachucha resurge de sus cenizas con el sol, o activé un sensor en el centro del pecho de Marta para que siempre sienta cómo está su chico, aunque sean muchos los kilómetros que los separen y el teléfono no funcione. También dibujé un abrazo y una ilusión por descubrir la vida en los ojos de mis sobrinos, para que fundan y diluyan todas las cosas que preocupen a mi hermano. Planeé una película antigua y con capacidad de transformarnos, para que mi tía, mi abuela y mi madre puedan compartirla juntas en el sofá de casa, con manta y mucho AHORA. Susurré en sueños miles de juegos a los niños para que nunca falte la alegría y la oportunidad de crecer, y lo aderecé con un poco de Alba y de Vero que siempre están queriendo jugar a lo que sea. Puse una Tere en la vida de mucha gente para que como un campo bien abonado lo que de verdad importa, florezca. Coloreé un Scott fiel, mimoso, peludo y feroz para que custodie los corazones de mis amigos allá en Argentina. Construí un escenario para Adela en el que poder subirse a diario porque sé que sabrá qué hacer con él; y una respiración profunda y divertida para que Celia y Esme no se estresen y sólo disfruten.  Compré una caja de pinturas para que Ana y su preciosa "sombra" puedan seguir teniendo siempre ese derroche de color. Para mi misma, me inventé una vida rodeada de ellos, de Darío y su/mi familia, y de muchos otros,  para seguir practicando cada día el arte de amar y  disfrutar sin condiciones.
Hoy animo a los humanos, artistas todos ellos por naturaleza, a que desenfunden sus herramientas creativas ya sean ordenadores, cacerolas, limpiacristales, pinceles o brochas, lápices o pizarras, un hazadón o su propio cuerpo y que las utilicen para reflejar la belleza que desean, y oh!! sorpresa!!!!... esa belleza florecerá a su lado
 

 

martes, 9 de octubre de 2012

Ser uno mismo

Nadie que te juzgue, nadie que te diga cómo debe ser la experiencia, qué lo correcto, cuánto el sentimiento o la sensación. Libre para ser nada y para ser todo y libre para ser amada a pesar de todo y de nada...
 
 

viernes, 5 de octubre de 2012

Over the Rainbow

 
 
"Cuentan que Ulises, harto de prodigios,
lloró de amor al divisar su Ítaca
verde y humilde. El arte es esa Ítaca
de verde eternidad, no de prodigios"
Borges.
 
 
Llévame de la mano a ese lugar que espera por mí sobre el arco iris, siguiendo el camino de baldosas amarillas o campo a tráves.
No me preocupa no tener zapatos de Rubí, que envidie cualquier bruja. Tal vez pueda así evitar la tendencia hacia el éxito que nos venden y que olvida la pregunta esencial: ¿estamos vivos o no estamos vivos? ¿somos felices o no somos felices? ¿somos nosotros mismos o somos lo que se espera de nosotros?
No anhelo prodigios, sólo latir con el arte que hace de mi Ítaca, verde eternidad. 

viernes, 28 de septiembre de 2012

MENOS ES MÁS

Cuando uno se tensa en el afán de exprimir la vida, es bastante común que acabe estrangulándola y obligándola a retroceder y a paralizarse en algún recoveco latente, esperando de nuevo la oportunidad en la volver a fluir, a traer con ella el color, la creatividad y el aliento de lo que no puede ser forzado, ni esclavizado.
A veces pongo más de mi misma, más para crecer, más para ser lo que sueño, más para que se oriente el camino... y a veces ese poner más, me hace olvidarme de que la auténtica vida fluye de forma natural y sin esfuerzos. No requiere nada de nosotros para ser.
Entonces salgo a pasear, me pierdo entre los árboles y piedras del bosque , diviso atardeceres y horizontes... y dejo de hacer más, de esforzarme. Y entonces el tiempo y las obligaciones, las preocupaciones y los pasos se detienen, se desvanecen.
La respiración y el silencio vuelven a encontrar su espacio en mi y yo en ellos como si fuésemos dos caras de la misma moneda; y entonces recuerdo que el crecimiento nunca deja de ocurrir, que ya soy lo que sueño, que somos parte del camino. Dejo de tensarme y exprimir una vida que ya me ofrece TODO y entonces, mientras esa VIDA sale del recoveco latente y vuelve a inundar cada diminuto sentido descubro la verdad del sinsentido "menos es más".
 

 
 

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Estelas en el cielo

Amanece el sol en mi mirada. Deja traslucir restos de naufragios de un alma que decidió caminar y despertas a la vida. Van cayendo retazos de sueños y cansancios, de desvalos y esperanzas.
Tiempo para mirar la estela que va dejando nuestra alma y fijar nuevo rumbo en nuestro horizonte. ¿Hacia dónde nos dirigiremos y cuáles serán nuestros pasos? ¿Cómo transitaremos las nuevas etapas y cuál será la bandera que nos represente? Tal vez... no haya bandera que pueda representarnos.
 
 


jueves, 6 de septiembre de 2012

FLUIR

 
...Es recordar  la sutil diferencia entre nadar con la corriente y dejarse llevar por el río...

viernes, 31 de agosto de 2012

CREER=CREAR

Todos somos creativos porque crear es
una capacidad inherente al ser humano.
Tal vez lo que nos distinga es
hasta dónde somos capaces de imaginar.
 


 

jueves, 30 de agosto de 2012

Renacer

...Cierra los ojos y cuando vuelvas a abrirlos de nuevo,
mira el mundo y a quien te acompaña
como si lo estuvieses contemplando por primera vez.
Así es también el AMOR,
una oportunidad continua de renacer cada segundo...
 
 

viernes, 24 de agosto de 2012

Paraíso

     Ahora que acabo de ver la película de "la Playa", y la dualidad y la locura que se mantiene entre un grupo de personas por seguir conservando su paraíso... no puedo evitar plantearme ¿cuál es la dualidad y la locura que mantenemos por seguir conservando nuestro paraíso particular? ¿Hasta dónde estamos dispuestos a mirar hacia otro lado? ¿Cuál es el precio que estamos dispuestos a pagar? ¿Cuánto vale una vida humana? ¿Y el amor? ¿Y la compasión?
     Nuestro paraíso... Ese paraíso es personal, mental, emocional y social. Se llama occidente, cultura, tecnología, ocio, consumo, éxito, importancia personal, placer, satisfacción, comodidad, rapidez, razón, dinero.
     Ese paraíso está en nuestra mente, en nuestras calles, en nuestros coches último modelo, en nuestra preciosa casa llena de lujos que amablemente compartimos con el banco, en nuestra pareja cumpliendo los estandartes de la belleza perfecta, en la marca de nuestra ropa, en nuestro nuevo móvil con conexión a internet...
     Algunos creen que su paraíso espera tras la muerte, otros que está aquí y ahora, otros que ni siquiera existe. Aún así todo ser humano lo busca, lo construye o paga el precio necesario para mantenerlo, pero ese paraíso no está fuera.
     El paraíso perdido está dentro, en cada uno de nosotros y no hay precio que pueda comprarlo, ni forma de dominio que pueda conquistarlo.

jueves, 23 de agosto de 2012

Buscándonos en el cielo

Cuando era pequeña me decían que era imposible contar todas las estrellas del cielo, y que si lo intentabas te saldrían verrugas.
Hoy, no sé si me sorprende más la maldición que caería sobre nuestras cabezas o el origen de ese anhelo, ya inscrito en el niño, de mirar el cielo y buscar el orden en el aparente caos de la inmensidad.

lunes, 20 de agosto de 2012

Esperando un milagro

     Aparece un nuevo día en el horizonte de tejados y antenas y nos pilla observándolo, esperando que traiga un milagro en el que creer, con el que levantarnos y seguir caminando.

     Silencio...
     Milagros que traigan risas y movimientos ligeros a tu enojo, milagros que traigan calma y aliento a la esperanza, milagros que saturen tus sentidos y te haga traspasar muros construidos y barreras autoimpuestas.
     Milagros para encontrar milagros en cada voz y en cada tiento. Milagros en respiraciones que ponen en marcha el nuevo mundo que llega...
Gente en las calles, corazones unidos, palmas al aire, pies en la tierra, manos sinceras, miradas profundas, abrazos encontrados, miedos disueltos...
     El hombre en busca de su sentido deja de esperar el milagro y enciende al fin la chispa del milagro que le espera a él (que le está esperando).



viernes, 17 de agosto de 2012

El sueño dormido

     He arrancado ya la noche de mis párpados cuando el despertador ajeno a mis sueños impulsa una nueva jornada. Meto mis pies en los zapatos dorminos y con ellos camino mi vida, abrazo a mi gente e hipoteco mi tiempo, mientras la inercia se hace dueña y señora de mi existencia.
     En esa jornada me esfuerzo persiguiendo fantasmas, atrapo humo en bancos de seguridades y encarcelo ideas y ganas peregrinas de lanzarse a la aventura de vivir y de tal vez despertar...
     Así, cada mañana, continúo arrancando la noche de mis párpados y recorriendo una vida silenciosa... el sueño continúa dormido.
Trsite y bello, así contado, ocurre hasta en las mejores familias y al menos un rato cada día.

viernes, 27 de julio de 2012

Playa del Silencio. Asturias

Vuelvo a afilar palabras, brotando, derramadas, de un ojo que ha logrado limpiarse de la comodidad del día a día y su letargo. Sentados en la playa del Silencio, los ritmos del espíritu vuelven a encontrar su sitio, penetrando los rincones que saben de denuncias y de renuncias consentidas, sanadoras.
Asfaltos y murallas aprisionan nuestras huellas por el tránsito vital de agua y fuego. Las olas y mareas vienen y van , avanzando, sorprendiéndonos mientras el niño que nos vive juega a recordarse entre piedras y caracolas marinas.
Cantos lejanos y propios se reúnen en un solo grito que empuja las prisas y las pausas uniendo el todo en el vaivén continuo y pasajero de un latido.Tierra de peregrinos que se saben de paso y descubren el permanecer formando parte, representando a cada instante el papel protagonista de la Historia del hombre en esta Tierra.


Ser la totalidad de la Nada. Ahora, en este instante diluido en un mar de sentimientos profundos que vienen a morir en las rocas que golpea. E-moción, energía en movimiento que de ningún lado vienes y a ningún lado vas, quédate esta noche en mis manos que como casa cobijan. Mañana marcharás a encontrar otras manos... las mías quedarán abiertas, porque otra e-moción las busca.

sábado, 14 de julio de 2012

LÁGRIMAS QUE CURAN

     Como río fluyendo sin trabas,
 sincero, sereno.
 Dejando que la vida atraviese
 creencias y alientos.
Expandiendo el sentido y el orden
 que deja a su paso lento.
Cada canto, cada orilla ocupa su lugar perfecto.
     Así, abrazo tus ojos
mientras eres testigo de este momento
 donde lo que tú y yo fuimos
 se lo lleva el viento.
 Deja que fluya sin trabas,
permite que lo natural se abra paso
 para seguir siendo.
 No hay motivo ni consuelo,
sólo deja que fluya
sin querer poner el freno.
Como niño pequeño
que aún no ha entregado la patria
que florece en la mitad de su pecho.

viernes, 29 de junio de 2012

El coleccionista de momentos

Algunas historias no son contundentes, esclarecedoras o impactantes, pero su energía tiene una sutileza particular donde uno sólo encuentra si busca.
El verdadero aprendizaje también tiene esa sutileza. Queda como semilla alerta aguardando las condiciones propicias para florecer. Nadie te empuja, ni te lleva de la mano, sólo te da la llave que abre puertas infinitas. Y entonces, cuando te atreves a cruzar alguna de ellas, todo cobra sentido.


Inspirado en "El coleccionista de momentos" de Quint Buchholz

¡Buenos días, mundo!

Encontrando la frecuencia que me permita sintonizar con el Cielo, con esta Madre Tierra y con la comunión de ambos que reside en mi esencia.
Despertando la memoria celular que trae la magia inscrita en el momento y en los ojos de aquellos que saben ver.
Continuando un viaje que se inició en los orígenes y que nunca se detuvo, ni aunque creyésemos estar parados. Sin embargo, esta vez, voy haciéndome consciente de mis pasos, y de los anhelos y expresiones de este alma peregrina que me guía.
Vuelvo a caminar, ligera de equipaje, mucho más allá de mis expectativas.
¡Gracias por acompañarme! ¡El Paraíso es nuestro, gracias por compartirlo!

lunes, 14 de mayo de 2012

Continuamos - Empezamos

En una mano, la cordura sujeta por hilos trenzados a mis dedos. En la otra, flotando, sin nada que lo asegure, el horizonte infinito. En medio un corazón que no sabe de nudos, dividido por un cerebro cuyo sino es crear conexiones y patrones que hagan "fácil" nuestra vida y nos "liberen" de la responsabilidad.
Me gusta mirarte despacio, jugando a descubrir los trucos que mis dos ojos hacen para que crea que sólo hay una visión, cuando como mínimo, ya cada uno de ellos tiene una imagen diferente de la realidad.
Y eso, sólo con mis dos ojos. Cuando pienso en los 2 ojos de tantos millones y millones de seres en este mundo... ¿Cómo podemos caer en la trampa de dar por "correcta" una única realidad?
¿Quiénes somos fuera de este redil de ovejas que nos lleva de un sueño a otro, que nos llena la cabeza de verdades absolutas y nos deja vacía la piel y el sentido?
No me creo a los que venden seguridades, certezas, a los que "dicen tener" la justificación para protegerme de la vida, a los que "poseen" la razón y "utilizan" la vara que mide lo justo pero ignora los corazones.
La lluvia cae, las flores y los niños nacen, mi pelo, mis uñas y tu sonrisa crecen, el arcoiris viene y se va, la luna sigue cambiando, mis células se reproducen, mutan, se mueren y se renuevan, la vida sigue brotando... y todo independientemente de nosotros.
No necesito, ni elijo por tanto un sistema "inventado" por el hombre, que me eduque sobre cómo vivir, cómo sentir, cómo elegir y cómo controlar el mundo.
No hay nada que podamos controlar, pero en el redil nos enseñan la ilusión del control, sutil truco de magia para tenernos controlados.
Somos libres.... libres, para creernos libres. ¡Despierta!

martes, 17 de abril de 2012

SOY

Soy el árbol caído abonando la Tierra y la hoja que brota renovando la vida. Soy el principio y el fin de una historia que se escriba en batallas, abrazos, muertes, decisiones y sueños. Soy lo que nunca seré y también soy aquello que enterré en mi memoria. Soy al tiempo el día que nace en mi mirada y el Sol que se pone en el otro extremo del mundo. Soy la sombra y la luz esperando en tus manos, la canción que duerme el dolor y el llanto que despierta la vida. Soy el silencio y el grito, la solución y la herida, el soldado y el niño, la raíz y la Tierra, el fruto y la semilla.
Somos la parte y el todo de este círculo de la vida, y aquello que no amo, no lo amo de mí misma, porque TODO es reflejo de mi Esencia y eso a veces, se me olvida.

sábado, 3 de marzo de 2012

¿Dónde está el alma de Madrid?

Últimamente cuando bajo a Madrid no puedo dormir  y, a pesar de las horas de insomnio, aún no he podido descubrir “objetivamente” a qué se debe.
Esta mañana me dirijo a realizarme una revisión rutinaria al Hospital de La Paz. Es increíble, por cierto, como dependiendo del momento político, los médicos son capaces de hacerte sentir un inconsciente por dejar pasar 2 años sin revisarte el pecho, o una irresponsable por malgastar los recursos sin tener síntomas. Y eso que esta vez habían pasado 6 años desde la última revisión. No importa, sonrío a la doctora que con tanta amabilidad me ha tratado y le agradezco su tiempo.

Continúo mi ruta, arreglando papeles y haciendo gestiones. Cuando uno “baja” a Madrid, si puede, hace todos los recados el mismo día. Y mientras camino entre gente y trasbordos de metro miro a mi alrededor y me pregunto en qué momento comenzamos a caminar mirando al suelo, en qué momento a pesar de mirar al suelo, pasamos por encima de personas que duermen, que piden limosna, y no los vemos, y aceptamos como normal que ellos ocupen ese lugar en nuestro mundo. Me pregunto a dónde vamos tan deprisa, por qué las miradas no se cruzan, por qué las miradas no sonríen.
Aprovecho y entro a comprar un libro que necesitaba. Me puede la debilidad y salgo con 3 libros y casi 50 euros menos. Me abre la puerta un señor que vende Kleenex. Supongo que cuando en el colegio le preguntaban que quería ser de mayor, nunca se le ocurrió decir “¡vendedor de Kleenex!”. De hecho, aunque trabajo a diario con niños, nunca he escuchado esa profesión en la boca de ninguno. Abro el monedero en busca de algo suelto y no hay nada. Me acuerdo del billete de 5 euros que tengo en el bolsillo, pero no lo saco. Le digo “lo siento” y sigo caminando. Con mucho sentido común he gastado 50 euros en la Casa del Libro, pero tal vez 5 euros sean demasiado para un simple vendedor de kleenex. Finalmente paro, doy media vuelta, saco los 5 euros y se los entrego. Y lo hago, no por el hecho de que ese billete pueda o no cambiar su vida, o la mía, sino porque necesito romper el pensamiento de que 5 euros es mucho dinero para compartir con ese señor que no conozco de nada y que a saber en qué se lo va a gastar. Como si gastárselo en libros, en ropa, en un coche, en un ipad o en lo que a cada uno le dé la gana fuese más digno que gastárselo en un bocadillo, tabaco o unas cervezas.

La mañana comienza a antojárseme especialmente intensa y decido dejarme llevar y seguir sintiendo. Continúo mi camino a pie en lugar de coger el metro. El día está soleado y seco, y mientras respiro Madrid y dejo que me inunde, la alergia primaveral que este año me acompaña en febrero, intenta por instantes hacerse protagonista.
Sigo entre la gente, fuera de la gente, alrededor y dentro de la gente. Y así, mirándoles de a uno, se van convirtiendo en personas… y veo adolescentes y me pregunto cuáles serán sus sueños, y veo a gente sola, y grupos de gente que gritan, que hacen fotos, abuelos que pasean a sus nietos, señores que leen el periódico… y me pregunto cuáles serán sus sueños, cómo se sentirán cuando regresen a sus casas y cierren la puerta a este mundo al que pertenecen por el día: ¿serán felices? ¿Tendrán amor? ¿Disfrutarán la calma y el silencio? ¿Podrán escuchar? ¿Serán escuchados?

Ya casi llego, pero sigo caminando. Y veo ancianos con bastón, en silla de ruedas, en silencio, con la mirada perdida, y una mueca de sonrisa permanente en la cara, una mueca de aceptación de lo que les toca en la vida. Miro a quienes les acompañan y veo silencio, miradas ausentes, seres ajenos unos a otros, ajenos a lo que hacen, a lo que comparten, a lo que les toca, ajenos a sí mismos.
Sigo mirando y camino. Y lloro. Las lágrimas empiezan a caer por las mejillas una tras otra, lentamente, muy despacio. La vida es hermosa, pero hay tanto sufrimiento absurdo, tanto dolor sin sentido, tanta soledad en una ciudad llena de gente, y de casas, y de cosas…

Este Madrid me regaló personas a las que amo, personas que marcaron la diferencia, personas que colorean mi vida, y con las que el tiempo se para cada instante. Este Madrid también es el mismo en el que crecí, en el que compartí abrazos, en el que me enamoré y besé por primera, por segunda, por tercera vez.  Es el mismo donde tantas veces he sonreído, y he celebrado la vida durante mañanas, tardes y noches inolvidables. El mismo donde se forjaron inquietudes y sueños entre cervezas, conversaciones en parques y plazas, y donde aprendí a mirar al cielo tumbada en el césped, justo en esas horas en las que tal vez, debía estar en clase mirando la pizarra.

Sé que Madrid, como toda moneda, tiene su cara y su cruz, pero hoy mientras me alejo de ella.... también sé por qué no la echo de menos.

lunes, 20 de febrero de 2012

CONTANDO MINUTOS


Harta de pasarme la vida contando minutos.
Suena el despertador, me precipito a la ducha caliente mientras desperezo las escasas 7 horas de sueño. Dejo preparando un café mientras me visto, y después me lo bebo casi por inercia mientras mojo 2 galletas, quizás 3.
Cierro la puerta de casa. Miro el reloj. El autobús debe estar a punto de pasar. Me siento en la parada mientras cuento los 2 minutos que el cartel electrónico dice que tardará en llegar. Ocupo esos 2 minutos en lo que puedo: miro a la gente, preparo el abono transporte, repaso las tareas del día y decido la ropa que me pondré esa noche para ir al cine. Subo al autobús y mientras decenas de personas me empujan cuento los minutos para que alguien se levante y pueda ocupar su asiento.
Llego al trabajo 3 minutos antes de mi hora de entrada. Cumplo las funciones que me tocan mientras revivo mentalmente la discusión de ayer con mi marido, decido la lista de la compra, cuándo iré a la farmacia a comprar el jarabe para el niño y qué habrá de comida hoy, porque tengo hambre.
Son las 13:55. Comienzo a recoger  5 minutos antes para salir a tiempo y librarme de la aglomeración en el comedor de la empresa. Cojo la bandeja y me sirvo. El de la caja me pregunta casi por rutina “¿Qué tal?”. Yo con la misma rutina respondo “De Lunes”.
Vuelvo al trabajo, acabo la reunión, voy al supermercado, a la farmacia… he perdido la cuenta de las veces que miré el reloj, pero quedan 70 minutos para que empiece la sesión de cine. Me cambio de ropa, cojo el coche, echo gasolina, veo la película. Vuelvo a casa mientras mi marido habla de la película, del tiempo, del atasco, de su jefe, de que mañana recogerá al niño que hoy duerme en casa de un amigo. Vamos a dormir, son la una de la mañana y necesitábamos tiempo para hacer algo solos, pero mientras pongo el despertador recuerdo que esta noche ni siquiera llegaré a mis escasas 7 horas de sueño… y así, paso los días contando los minutos para el fin de semana que ya hemos planeado, preparo las vacaciones para mi mes de verano aunque estemos en marzo y cuento los minutos para que lleguen, y para que mi hijo crezca, y para que yo me jubile y por fin tenga tiempo. Cuento los minutos porque algún día viajaré a Turquía, porque algún día escribiré un libro y quién sabe, tal vez plantaré un árbol en el jardín de esa casita que voy a comprarme cuando junte el dinero.
Cuento los minutos para que mi hijo se gradúe, para que encuentre trabajo, para que elija alguien con quien formar una familia. No me gusta la que ha elegido, como es natural, pero aún así, cuento los minutos para que el domingo vengan a verme y yo pueda ver a mis nietos. Cuento los minutos que mi marido gasta viendo el fútbol y metido en internet. Ya me he jubilado y ahora cuento los minutos que me toca esperar para la consulta del médico y los comparo con los minutos de atención que me presta. Cuento los minutos…
Acaba de darme un infarto y cuento los minutos que tarda en llegar la ambulancia. Me intentan reanimar, pero no pueden. Y entonces, el tiempo se para y dejo de contar los minutos y empiezo a contar… los besos que te di, las veces que dije te quiero, los momentos que disfruté, los amigos que me acompañaron, los proyectos que terminé y los que no tuve valor para iniciar, las veces que hice el amor, los libros que leí, las canciones que me emocionaron, los amaneceres que pude contemplar, los abrazos que me regalaron…
Perdóname si no quiero seguir contando, analizando los pros y los contras de cada paso que doy, sufriendo por las arenas de pasión que resbala entre mis dedos y no puedo controlar, ordenando cajones para que cada cosa esté sólo en el lugar que le corresponde sin que nada se mezcle o se “contamine”, si decido dejar salir todas las voces que ya no me corresponden porque sólo hablan de un pasado y un futuro que no existe. Perdóname si dejo cicatrizar las heridas de la neurosis que a veces nos guía y vuelvo simplemente a verte, a hablar de sueños, a reír sin prisa, a llorar sin culpa, a romper patrones, a quitarme el disfraz que me coloca en tu escaparate. Perdóname si cuando esperas que sea la misma, he cambiado.
Al final vendrá la muerte y me recordará la vida, compuesta de momentos y retales, de trozos de vivencia que quedaron flotando en el tiempo de la memoria… y cuando eso ocurra, sabré que tuvo sentido, aunque sólo sea para contar una historia que despierte a otros de la hibernación de su ahora.
Definitivamente, quiero ser la protagonista de la vida que me acontece. Elijo vivir y no sólo pasar la vida…. Contando minutos.

domingo, 29 de enero de 2012

Florecer, compartir

Ya no es tiempo de seguir cultivando ideas a la luz de nuestra intimidad. Esas ideas están comenzando a florecer, y su belleza y medicina merecen ser compartidas con otros.

lunes, 23 de enero de 2012

ESPIRAL

La Vida es un presente infinito en el que se concentra toda la Existencia. A veces tenemos la ilusión perceptiva de que todo es igual, de que se repiten rutinas... Cuando eso ocurre es la señal de que nos estamos durmiendo, de que enfermamos, de que dejamos escapar el regalo de estar vivos.
Cada AHORA está vivo y lleno de murmullos, un baile infinito entre la maquinaria perfecta que une nuestros corazones.
¡Acepta el baile, danza mientras te quede aliento y fluye sin repetir la coreografía que aprendiste! ¡El movimiento está en ti y si lo liberas cada parte de tu ser seguirá el ritmo más allá de la perfección que intuyes, porque para eso fueron diseñadas!