sábado, 21 de enero de 2017

Azul Salvaje

Aprendimos a vivir con charcos en las botas y el sol en la mirada, arco iris de color pintando una calle en blanco y negro, encontrando paraísos en callejones aparentemente sin salida.

Brindemos por la luz de las noches estrelladas, sigamos soñando grande y caminando despacio, al ritmo de un latido que nos pertenece.

Reconozco tu dolor transformado en alegría, en poesías cotidianas y gestos que devuelven un espejo en que mirarse y traspasar fronteras para descubrirnos libres de abrazar lo que aceptamos amar sin condiciones.

El ruido va cayendo en el silencio del que emergen las verdades y me encuentro celebrando, recordando el punto exacto que nos une y lo inunda todo de azul salvaje.

Me reconforta mirar sin miedo lo que somos, más allá de roles y expectativas y descubrir que la sonrisa y el abrazo se tornan más profundos.

Que no estamos solos, que el tiempo no para y sí, "mira hacia el cielo, baja la guardia, que pase la tormenta...", sigue camino, enlaza señales, siente la calma y cuando lo necesites date la vuelta, nos seguiremos encontrando al otro lado de nosotros mismos.